«Quien no ha sufrido a causa del conocimiento no ha conocido nada» CIORAN.

Cuando pensamos demasiado nos encontramos siempre con un diálogo interno que parece desdoblarse como si de un inquilino se tratase que habita en nosotros y nos dice, nos plantea su opinión sobre aspectos de nuestra vida que nos preocupa.

 

¿ Qué tipo de inquilino vive contigo?…¿ qué te dice?

 

1-«Piensa más allá de lo pensable»

Actualmente queremos llegar a un rigor de pensamiento tan lógico que este inquilino nos dice enunciados como: «Piensa el pensamiento que te piensa en el que nunca has pensado pensar».

 

Si te dejas arrastrar por resolver ésto acabarás atrapado en pensamientos sin salida.

 

Una duda muy frecuente entre los hombres jóvenes, por ejemplo, es la relacionada con las tendencias sexuales: ¿Soy heterosexual, homosexual o bisexual?. Evidentemente la respuesta a esta pregunta se encuentra en las sensaciones del individuo y no en los razonamientos. Pero si trato de estudiar y controlar mis reacciones ante diferentes estímulos eróticos, por ejemplo, mientras miro a una mujer guapa o mientras miro a un hombre guapo, intentando controlar lo que siento, inevitablemente mi intento de controlar de modo voluntario lo que debería sentir de forma espontánea altera mis percepciones: las sensaciones estarán influidas por la interacción entre la mente y los sentidos. Se desencadena así un fenómeno perceptivo y cognitivo definitivamente confuso, por lo que el intento de aclarar las propias tendencias sexuales naturales arroja sombras siniestras y alimenta las dudas.

 

2-«Debo estar seguro antes de actuar.»

Analizo exhaustivamente todas las variables para tomar una decisión o solucionar un problema para así escojer finalmente la mejor opción, pero la búsqueda continua de lo mejor hace que se llegue inevitablemente al bloqueo de la acción.

 

3-«En cualquier caso eres culpable»

En este caso tu pensamiento se disfraza de inquisidor que te recuerda constantemente tus culpas pasadas o futuras, hasta llegar a hacerte culpable de algo que no has cometido.

 

4-«De todos modos te equivocas»

Tu personal saboteador que sabotea cualquier cosa diciéndote que de todo modos cometerás un error. Tu pensamiento te lleva a la búsqueda constante de seguridad que te hace a su vez estar más inseguro, con lo que nunca tienes la certeza de haber actuado del mejor modo posible.

 

5-«De todas formas no estás a la altura»

Cuando un perseguidor inetrior te dice que no serás capaz de hacer una cosa o de enfrentarte a una situación hace que, como en los casos anteriores, busques racionalmente pruebas para superar una duda irracional.

 

6-«De todas maneras debes delegar a quien es mejor que tu»

Si delegas en los demás por sentirte capaz o inseguro  éste pensamiento hace que llegues a bloquearte inclúso ante las decisiones más sencillas y que tengan poca responsabilidad.

 

Conclusión

Todos estos inquilinos hacen que nos veamos atrapados en un bucle de duda patológica de la cual no sabemos salir…con lo que recuerda hay que vencer la batalla sin combatir: ¡ ESCRIBE !

 

«Antes de valorar si una respuesta es exacta debe valorarse si la pregunta es correcta» KAN