¿ Conversaciones difíciles ? Cómo afrontarlas

1. Prepárate: Si sabes que vas a tener una conversación difícil, trata de prepararte para ello. Piensa en lo que quieres decir, cuáles son tus objetivos y cuáles son las posibles respuestas que recibirás. También es importante que consideres el contexto y la situación en la que se desarrollará la conversación.
2. Escucha activamente: Durante la conversación, trata de escuchar activamente lo que la otra persona está diciendo. Presta atención a su lenguaje corporal y a sus emociones. Si no entiendes algo, pide aclaraciones sin interrumpir.
3. Mantén la calma: Aunque la conversación sea difícil, trata de mantener la calma. Si pierdes los estribos, puedes hacer que la otra persona se sienta atacada y la conversación se vuelva más tensa.
4. Sé honesto y directo: Es importante que seas honesto y directo al expresar tus sentimientos y puntos de vista. Sin embargo, trata de hacerlo de una manera respetuosa y sin atacar a la otra persona.
5. Busca soluciones: En lugar de centrarte en los problemas, trata de buscar soluciones. Piensa en opciones que puedan satisfacer las necesidades de ambas partes.
6. Usa el lenguaje adecuado: Elige tus palabras con cuidado y utiliza un lenguaje que sea claro y respetuoso. Evita el lenguaje agresivo o acusatorio.
7. Acepta tus errores: Si cometes un error o dices algo inapropiado, reconócelo y pide disculpas. Esto puede ayudar a aliviar la tensión y hacer que la conversación sea más constructiva.

Recuerda que cada conversación es única y que estos consejos pueden no ser aplicables en todas las situaciones. Lo importante es que tengas en cuenta las necesidades de ambas partes y trates de buscar una solución que sea satisfactoria para todos.

La Terapia Breve Estratégica (TBE) puede ser muy útil para afrontar conversaciones difíciles, ya que se enfoca en identificar y modificar los patrones de pensamiento y comportamiento que están causando el problema. A continuación, te presento algunos principios de la TBE que pueden ayudarte a afrontar conversaciones difíciles:

1. Identifica el objetivo: En primer lugar, es importante que identifiques cuál es tu objetivo en la conversación difícil. ¿Quieres resolver un conflicto? ¿Expresar tus sentimientos? ¿Negociar algo? Saber cuál es tu objetivo te ayudará a enfocar la conversación y a evitar desviaciones innecesarias.
2. Focalízate en el problema: En la TBE, se enfatiza la importancia de focalizarse en el problema en lugar de en las emociones que lo rodean. En una conversación difícil, es fácil dejarse llevar por las emociones y perder de vista el objetivo. La TBE te ayuda a mantener el foco en el problema y en buscar soluciones.
3. Cambia tu perspectiva: A veces, cambiar tu perspectiva puede ayudarte a afrontar la conversación de una manera más efectiva. Por ejemplo, si estás teniendo una discusión con alguien, trata de ponerse en su lugar y ver las cosas desde su punto de vista. Esto puede ayudarte a entender mejor sus motivaciones y necesidades.
4. Utiliza estrategias de comunicación efectiva: La TBE ofrece una variedad de estrategias de comunicación efectiva que puedes utilizar durante la conversación difícil. Por ejemplo, puedes utilizar la reformulación para asegurarte de que estás entendiendo correctamente lo que la otra persona está diciendo, o puedes utilizar preguntas abiertas para animar a la otra persona a expresar sus sentimientos y pensamientos.
5. Reconoce y acepta las emociones: La TBE reconoce la importancia de las emociones en la toma de decisiones y en la resolución de conflictos. Es importante que reconozcas y aceptes tus propias emociones, así como las de la otra persona, durante la conversación difícil. Esto puede ayudarte a gestionarlas de una manera más efectiva.

En resumen, la TBE puede ser muy útil para afrontar conversaciones difíciles, ya que te ayuda a focalizarte en el problema, cambiar tu perspectiva, utilizar estrategias de comunicación efectiva y gestionar tus emociones.